Los investigadores estiman que aproximadamente un tercio de las visitas a la clínica y las llamadas a los consultorios de los pediatras se deben a la fiebre. Es comprensible que los padres se preocupen cuando sus bebés tienen fiebre alta y están inquietos o irritables. Pero en muchos aspectos, la fiebre es buena. La fiebre es la respuesta natural del bebé a la lucha contra una infección. Desde un punto de vista fisiológico, la fiebre ayuda al cuerpo a eliminar las bacterias y los virus que pueden enfermarlo.
Sin embargo, la fiebre suele presentarse sin otros síntomas como congestión nasal, diarrea o vómitos, y la fiebre leve puede ser un efecto secundario de la dentición o de las vacunas. Por lo tanto, a muchos padres les resulta difícil determinar cómo tratar la fiebre en un bebé.
Tratamiento de la fiebre en los bebés
La Academia Estadounidense de Pediatría (AAP) establece pautas sobre cuándo se debe buscar tratamiento médico para un bebé con fiebre.
Los bebés menores de 6 semanas que tengan fiebre de más de 100.4 °F deben ser examinados por un médico de inmediato. Los bebés pequeños pueden enfermarse muy rápidamente y se justifica la atención médica inmediata. No le dé a su bebé acetaminofeno o ibuprofeno hasta que un médico evalúe su condición.
Los bebés de 7 semanas a 3 meses que tengan fiebre de más de 101 °F deben ser examinados por un médico en unas pocas horas, pero no inmediatamente. Por ejemplo, si su bebé tiene fiebre en mitad de la noche, puede esperar hasta la mañana para comunicarse con el médico a menos que presente otros síntomas o la condición del bebé empeore.
Los bebés de 3 a 6 meses deben ser examinados por un médico si tienen fiebre de hasta 102 °F y presentan síntomas de enfermedad, o si tienen fiebre mayor de 102 °F sin otros síntomas presentes.
En términos generales, se deben esperar 24 horas antes de buscar atención médica para bebés mayores de 6 meses. Las excepciones son:
- Una fiebre que sube por encima de 104 °F varias veces.
- Un bebé somnoliento, demasiado inquieto o que parece muy enfermo.
- Un bebé con rigidez en el cuello, dolor de cabeza intenso, dolor de garganta intenso, dolor de oído intenso, sarpullido o vómitos y diarrea continuos.
- Un bebé que parece deshidratado.
- Un bebé con un sistema inmunológico comprometido debido a una condición médica.
- Un bebé que sufre una convulsión.
También debe consultar a un médico si un bebé menor de 24 meses tiene fiebre durante más de 24 horas o un niño mayor de 2 años tiene fiebre durante más de tres días.
Tratamiento de la fiebre en casa
El tratamiento de la fiebre debería hacer que el bebé se sienta mejor, pero no necesariamente normalizar su temperatura si la fiebre es leve. Los medicamentos de venta libre pueden ayudar a reducir la fiebre del bebé para que se sienta más cómodo.
Los médicos advierten a los padres que sigan cuidadosamente las instrucciones de dosificación para asegurarse de que los bebés no reciban demasiado acetaminofeno o ibuprofeno.
Aquí hay algunas otras formas de ayudar a que un bebé con fiebre se sienta mejor:
- Asegúrese de que beba muchos líquidos. El agua, los helados y la gelatina saborizada son buenas opciones para los bebés más grandes.
- Mantenga la temperatura dentro de su casa entre 70° y 74°F.
- Viste al bebé con pijamas ligeros de algodón. Demasiada ropa retiene el calor y hace que la temperatura suba.
- Permita que su bebé descanse lo suficiente.
Cosas que no debes hacer si tienes fiebre
Según la AAP, los padres no necesitan darles acetaminofeno o ibuprofeno a los niños si tienen fiebre de menos de 100 °F, a menos que el bebé se sienta incómodo. Los padres tampoco deberían despertar a los bebés para administrarles más dosis de medicamento, dice la AAP.
Además,
- Nunca le dé aspirina a un bebé o un niño.
- No le dé un baño frío a un bebé ni use alcohol isopropílico para bajarle la fiebre.
- Dele a su bebé una dosis de acetaminofeno antes de bañarlo con agua tibia.
De lo contrario, su hijo puede experimentar escalofríos y temblores mientras el cuerpo intenta elevar su temperatura después del baño.
